sábado, 23 de febrero de 2013

Amour (2012)


Michael Haneke narra la vida como tragedia ineludible, inexorable y cotidiana en esta galardonada cinta. Jean-Louis Trintignant, nunca más el joven estudiante de Derecho encantado por Vittorio Gassman en Il sorpasso (1962) ni el campeón de automovilismo enamorado de Anouk Aimée en Un homme et une femme (1966), se convierte en el único apoyo y fortaleza de su mujer, una irreversiblemente frágil Emmanuelle Riva, también lejísimos de Hiroshima mon amour (1959), entregada por la fatalidad de la experiencia humana a la paciencia y devoción infinitas, incondicionales de su marido. Ambos venerables actores brindan lo mejor de sí mismos, y Trintignant será una revelación --aun impactante debido a la avanzada edad del Conformista de Bertolucci-- para quienes ni siquiera hubieren advertido o prestado atención a su presencia en el reparto. Haneke vuelve a contar, además, con su “profesora de piano”, la siempre ajustada Isabelle Huppert. Sobriedad enigmática, casi metafísica y nada melodramática que logra descorrer el velo sobre lo que en verdad somos (el amor vivido, con los pies en la tierra, mediante).

No hay comentarios:

Publicar un comentario